Mi muro y opiniones de autoridades

viernes

Emilio Lledó: " Ahora más que nunca recomiendo la filosofía"

"Cada año que pasa a Emilio Lledó le dan un premio mejor y le quitan alguna hora de Filosofía en el programa de Bachillerato".

Pero ya no se recuerda cuando a mediados de la década de los 80 a Emilio Lledó se le cerró el acceso a una cátedra de la Universidad Complutense para la que él tenía sobrados méritos y, por supuesto, muy superiores a quien fuese su beneficiario final. Cosas que pasan en este país que premia a los que tienen padrinos... Pero, sin embargo, Lledó inmediatamente pudo irse a una prestigiosa universidad alemana, sin concursos ni procedimientos burocráticos para enmascarar corruptelas o politiqueterías... Afortunadamente, sus méritos brillan y los premios recientes hacen justicia al pensador. Empero, este país, España, sigue despreciando y atacando a la filosofía a medida que más se degrada su vida pública. Triste, pero quizás sea uno de los resabios de aquel Antiguo Régimen en el que la compra o mercadeo de cargos era una de las escasas vías de hacer prosperar a la parentela...


EMILIO LLEDÓ, EN EL PROGRAMA "PIENSO, LUEGO EXISTO"

" Las cosas grandes que se han hecho en la vida se han hecho con un punto de utopía, con un punto de sueño, con un punto de idealismo, con un punto de amor, con un punto de " filía" -que dirían los griegos-, de amistad. Pero, claro, para eso tienes que amarte a ti mismo, no desde el punto de vista del egoísmo, sino amar quien eres y, por lo tanto, para amarte a ti mismo tienes que ser una persona decente, una persona honrada, una persona justa o, por lo menos, que luches por eso..."


"Sólo las almas innobles, innobles, se obsesionan por la economía". Concesión del Premio Princesa de Asturias al filósofo Emilio Lledó:




ENLACES DE PRENSA:

De Luis Alemany ( El Mundo) :

Premio Princesa de Asturias de Humanidades

Emilio Lledó: 'Hay políticos que creen en la ignorancia como una manera de hacernos manipulables'

El humanista sevillano, de 87 años, ve reconocida su carrera de diálogo con las fuentes clásicas del pensamiento. El jurado valora de Lledó que "concibe la filosofía como meditación sobre el lenguaje"

"La ignorancia se cultiva, se fomenta. Hay políticos que creen en la ignorancia como una manera de hacernos más manipulables. En una sociedad crítica es difícil que los majaderos nos dominen. Y esa es una lucha a la que no hay que renunciar".

Lledó también habló ayer de políticos y de la edad del descontento en el que vivimos: "La codicia... Para vivir no se necesita tanto.¿Para qué tanto? Si fueran libros, quizá... Recuerdo a un amigo, un hombre muy rico y un gran creador de riqueza, al que fui a ver cuando estaba enfermo y se iba a morir. Me dijo: 'Tanto dinero y no poder comprar ni un minuto más de tiempo...'".

"Me preocupa la corrupción de la mente de aquellos que tienen poder sobre los demás. Eso está en La República de Platón: lo malo del indecente con poder es que destruye la ciudad. La mente del mentiroso acaba por corroerse a sí misma. ¿Cómo debe ser la mente del político? El político no puede ser feliz, porque su ser es darse, entregarse a la justicia y al bien de los otros. Y no digo el bien común porque es una expresión que ya está deteriorada".


Emilio Lledó: “Ojalá este domingo regrese la decencia”

“Ahora más que nunca recomiendo la filosofía a cualquier joven”, dice el ganador del premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades

Volviendo a la decencia… Para Emilio Lledó, aquellos emigrantes la encarnaban como nadie. Y se hace urgente recuperarla: “Ojalá este domingo regrese precisamente eso, la decencia. Debemos votar por ello, sería una bendición que nos ayudaría a cortar el paso al engaño, la falsedad, resultaría toda una venganza contra los prepotentes”.

No comprende el pensador por qué se ha torcido y retorcido el verdadero eje de la política. “Para mí sigue resultando válido lo que Aristóteles resaltaba como gran característica de quien se dedique a ella considerándola servicio público. Una tarea para hombres decentes”, propugnaba el filósofo hace 24 siglos. “Sin embargo, ahora, está en gran parte en manos de lo contrario y, además, esa falta de virtud se exhibe con poder. Lo que debería ser la política se ha transformado en estupidez y chulería nauseabunda”.


martes

LA FOLÍA « MusicaAntigua.com

La follia ( la locura) de España fue uno de los temas más recurrentes del barroco. Posiblemente una danza pastoril de origen luso, portugués, pero comúnmente asociada a la península ibérica, brindó un motivo musical de inspiración para grandes genios de la música barroca.



Para conocer más sobre su historia puede visitarse este enlace:



LA FOLÍA « MusicaAntigua.com

Texto extraído de esta interesantísima página web: " La Folía (La locura), también conocida como Folías de España o Folía de España, es uno de los temas musicales europeos más antiguos y recurrentes. Además de indicar dos temas musicales parecidos, pero con características muy definidas (la “folía temprana” y la “folía tardía”), el termino folía es utilizado también para designar un esquema armónico-melódico utilizado en cientos de composiciones a partir de finales del siglo XV.

La definición del término “Folía” que Sebastián de Covarrubias proporciona en su “Tesoro de la lengua castellana” (Madrid, 1611), es:

“Una cierta danza portuguesa de mucho ruido; porque resulta de ir muchas figuras a pie con sonajas y otros instrumentos, llevan unos ganapanes disfrazados sobre sus hombros unos muchachos vestidos de doncellas, que con las mangas de punta van haciendo tornos y a veces bailan, y también tañen sus sonajas; y es tan grande el ruido y el son tan apresurado, que parecen estar los unos y los otros fuera de juicio. Y así le dieron a la danza el nombre de folía, de la palabra toscana ‘folle’, que vale vano, loco, sin seso, que tiene la cabeza vana”.

El embrujo que desprende esta antigua danza popular de pastores de la Península Ibérica (S. XV/XVI), uno de los pilares fundamentales de la música en Europa y América, atrajo a muchísimos compositores, desde el Renacimiento y sobre todo el Barroco, hasta el Clasicismo e incluso el siglo XX: Diego Ortiz, Antonio Martín y Coll, Arcangelo Corelli, Marin Marais … y tantísimos otros, dan muestra de ello."


Como ejemplos populares de creaciones musicales con el tema de "La folía" podemos recordar:



La follia de Corelli:





La follia de Vivaldi:





Sarabande de Handel:




domingo

Agradezco al Prof. y científico Gilberto Cunha una reseña a mi "Caballo de Troya de Descartes" en el Jornal " O Nacional" ( Brasil)

Quiero agradecer al científico brasileño D. Gilberto R. da Cunha el honor recibido por el interés demostrado hacia mi libro "El caballo de Troya de Descartes", al dedicarme un favorable artículo de opinión en el Jornal O NACIONAL .Gilberto R. da Cunha es un experto científico, climatólogo, meteorólogo, profesor y escritor( véase http://es.wikipedia.org/wiki/Gilberto_Rocca_da_Cunha ) , y autor de "Galileu é meu pesadelo" y de "A ciência como ela é", dos excelentes libros que merecen ser conocidos internacionalmente y que, personalmente, me gustaría encontrar también traducidos al castellano, no sólo para enriquecimiento de la cultura filosófico-científica iberoamericana, sino también por el valor intrínseco del pensamiento que se gesta en la América que habla las lenguas ( hermanas) latinas y que debería ser conocido internacionalmente, puesto que la antorcha que ilumina los caminos de la historia de los pueblos espera ser alzada por brazos latinoamericanos. Gracias, Profesor.

Creo que D. Gilberto ha visto la importancia de la perspectiva que ya en los años sesenta abriese el sabio italiano Morpurgo-Tagliabue, y que yo, por caminos independientes y sin previa lectura de su libro " I processi di Galileo e l'epistemologia", he tratado de destacar por su enorme relevancia para situar en su exacto contexto la génesis del pensamiento sistemático cartesiano. Sin atreverse a desvelarlo claramente, Descartes se había batido en duelo con la duda dogmático-teológica del mismo Papa Urbano VIII, de quien se hicieron eco pensadores de su tiempo como Morinus, Galileo, Mersenne... Hasta tal punto esto es así, que pienso que el escepticismo que a Descartes tanto preocupaba no era el inerme escepticismo de los clásicos ni los humanistas renacentistas, puesto que el horizonte de toda la atención y visión cartesiana lo daba la ciencia emergente, la físicomatemática que él pudo conocer a través de Beeckman y - mediatizado por éste y Mersenne- de Galileo. El escepticismo que le preocupaba más era el de la duda dogmática representada por la "angélica doctrina" del Papa Urbano VIII; duda contra las nuevas orientaciones de la investigación científica que, por proceder de tan altas instancias, no podía pasar desapercebida por una mente tan genial y despierta como la de Descartes. La duda metódica, como artificio destinado a ser superado para rearmonizar la necesaria correspondencia entre lo racional y lo real ( es decir, el viejísimo prejuicio eleático), no puede entenderse sin ser contextualizada - en palabras de Morpurgo-Tagliabue- en ese terreno común "di scontro" ( de choque o enfrentamiento) que fue la duda planteada por el Papa contra las pretensiones de validez de la orientación metodológica seguida por Galileo Galilei como seguro camino para alcanzar la certeza del conocimiento físico con la ayuda auxiliar del análisis matemático...


http://www.onacional.com.br/colunistas/20/posts/4089




Galileu, Descartes e Eu


Antes que pareça demasiada a pretensão do colunista e algum leitor possa concluir que o escriba, ao se imiscuir entre dois gigantes do pensamento filosófico universal, perdeu o senso do ridículo (ou o juízo), apresso-me em esclarecer. Qualquer alusão ao título dessa coluna deve ser entendida com base no conteúdo de um e-mail que recebi, na véspera do Natal passado, desde Córdoba/Espanha, enviado pelo professor Antonio Hidalgo Pedraza, perguntando se eu era o autor do livro “Galileu é meu pesadelo”. Com a resposta afirmativa, foi esclarecida a intenção do professor Hidaldo, que era enviar o livro que ele havia recém publicado na Espanha, “El Caballo de Troya de Descartes: La Duda Metódica y el Secreto del Genio Maligno”, para eu apreciar a tese, nem sempre perceptível ou assumida por muita gente, que ele defendia na obra, tratando da influência de Galileu sobre Descartes, no que tange à relação entre a dúvida metódica e as figuras de um Deus enganador ou de um Gênio maligno.

Foi a dúvida metódica cartesiana, ao questionar o pensamento escolástico-aristotélico, que nos conduziu à filosofia do sujeito pensante (ego cogito). E foi por duvidar dos cálculos dos geógrafos helenistas e medievais que Colombo pode achar a América, por exemplo. Assim, quer seja na ciência, no mundo dos negócios ou no dia a dia de qualquer um de nós, temos que duvidar dos limites das certezas humanas estabelecidas (ou que herdamos pela educação que recebemos) para que possamos aventurar-nos em busca do novo (que não é necessariamente melhor do que já temos). Essa foi, na minha visão, a grande contribuição deixada por René Descartes, ao nos ensinar a por em dúvida/cheque a visão de mundo herdada do passado. Pela dúvida metódica de Descartes, há que se começar duvidando de tudo, na mais radical crítica que podemos submeter a nossa razão.

René Descartes não era muito adepto do reconhecimento das contribuições e influências de outros autores sobre a sua obra, nem dos pensadores do passado e nem dos seus contemporâneos. Não foi diferente com Galileu, cuja condenação pela Inquisição (1633), até pela proximidade que Descartes tinha com os jesuítas, e cujas obras “Diálogos sobre os dois grandes sistemas” (1632) e “Duas novas ciências” (1638), ainda que ele tivesse negado que conhecia, há evidências em documentos e correspondência, levantadas pelo professor Hidalgo, que demostram o contrário. Sim, afirma taxativamente o professor Hidalgo, Descartes conhecia a condenação pelos tribunais da Inquisição e não ignorava a obra de Galileu. Então, por que o homem que se esmerou em “andar mascarado pela vida” sempre negou isso?

Não foi sem razão que Descartes, prudentemente, tratou de evitar qualquer enfrentamento com as autoridades eclesiásticas. A tese do professor Hidalgo é que René Descartes usou uma tática equivalente ao famoso “cavalo de Troia” para questionar o princípio, então dominante e defendido pela Igreja, da onipotência infinita de Deus, e assim poder construir um conhecimento estritamente científico do mundo, que pelo racionalismo cartesiano significa um conhecimento baseado em verdades inquestionáveis e demonstráveis. Afinal, como afrontar um Deus enganador que podia tudo, inclusive fazer que não houvesse acontecido algo que já havia acontecido no tempo ou que algo verdadeiro se transformasse em falso?
Então eis que, o verdadeiro Cavalo de Troia de Descartes, deixado como “presente aos inquisidores”, para evitar equívocos de fé, driblando os escolásticos, foi a substituição, no final do desenvolvimento do processo da dúvida metódica, da figura de um Deus enganador pela figura de um Gênio maligno. Afinal, a pretensão de Descartes foi escapar da submissão da razão aos condicionantes ideológicos da tradição medieval, que deram causa à condenação de Galileu Galilei